Tratamiento en la instalación sin fin

En la instalación sin fin se vulcaniza el manchón preparado previamente con la capa de pegamento y el tejido y se le aplica una capa de color exterior. Para ello, el manchón hinchado a presión para que toque el tejido se hace pasar 2 veces a una velocidad de 5 m/minuto por unidades de pintura separadas y, después de cada pasada, por dos canales de aire caliente a 220 °C en los que se seca la pintura y se activa el pegamento sólido. A continuación, se enfría la manguera en un baño de agua y se recubre finalmente con una lámina. El movimiento longitudinal en la instalación sin fin se consigue mediante una tracción de oruga que hace avanzar la manguera homogéneamente como si tuviera muchas manos. Esta línea de trabajo es una instalación sin fin, porque aquí no se cortan inmediatamente las mangueras después de activar el pegamento sólido y la aplicación de la pintura, sino que previamente se enrolla en grandes bobinas.

Una vez que ha finalizado el tratamiento de la manguera en toda su longitud, se corta en la máquina siguiente. Un dispositivo de enrollado especial tira de la gran bobina de almacenado para extraer las longitudes previamente introducidas en el ordenador y las enrolla debidamente. Un operario acompaña este proceso. Corta con un cuchillo la manguera medida individualmente, la retira de la máquina y la ata. Este procedimiento es especialmente importante cuando se solicitan unidades de medida no métricas como, por ejemplo, „pies“, o para elaborar mangueras de una longitud extrema de hasta 200 metros.